Clara Resines. Delegada de Alcalá de Henares
¿Por qué te hiciste farmacéutica?
-Me hice farmacéutica porque es una carrera que tenía bastantes salidas y diferentes ramas: hospitalaria, laboratorio, farmacia comunitaria… Quería conocer los diferentes sectores.
¿Qué es lo que más te gusta de tu profesión?
Escogí farmacia comunitaria porque lo que realmente me gusta es el trato con el paciente, el tú a tú, el día a día, el poder estar pendientes de su medicación, de su salud.

¿Qué significa para ti ser delegada del COFM?
-Soy delegada en Alcobendas, y en esta zona somos alrededor de 30 farmacias. Mi misión como delegada es establecer una acción real entre el Colegio y los farmacéuticos de Alcobendas, y lo conseguimos porque tenemos un grupo donde nos ayudamos, compartimos información, y la verdad es que a mí me transmite mucha satisfacción el poder compartir toda la información en el día a día y poder hacer proyectos nuevos y con la colaboración de diferentes compañeros.

¿Alguna anécdota en tu trayectoria profesional?
-En nuestro día a día tenemos un millón de anécdotas con nuestros pacientes, pero lo que más nos gusta es cuando nos traen, para agradecernos nuestra labor, dibujos, tomates de las huertas, laurel… Todas esas cosas que se agradece mucho.

¿Qué aficiones tienes fuera de la farmacia?
-Fuera de la farmacia le dedico tiempo a mi familia, y teniendo tres hijas adolescentes consume mucho tiempo y muchos quebraderos de cabeza (risas). Pero me gusta hacer deporte con ellas, esquiar, jugar al pádel y viajar en familia.

¿Qué crees que se podría mejorar en tu sector?
-Me gustaría dedicarles más tiempo a los pacientes y no tanto a la burocracia, porque estamos llenos de papeles por todas partes, y realmente lo que queremos es estar con el paciente, estar pendientes de su seguridad, de sus tratamientos, de su día a día y no tanto de esta burocracia que nos hace perder muchísimas horas.